Los guerreros ecológicos que triunfaron en las batallas de David y Goliat con los gigantes de la minería y la petroquímica se encuentran entre los galardonados con un prestigioso premio ambiental esta semana.
EL Premio Ambiental Goldman – apodado el “Premio Nobel Verde” – se otorga a activistas de base que van más allá para proteger el planeta.
Los ganadores de este año fueron: Alessandra Korap Munduruku (imagen principal), que salvó de la minería tierras indígenas en la Amazonía; Chilekwa Mumba, que demandó a los propietarios de una mina de cobre contaminante en Zambia; Delima Silalahi, que rescató franjas de Indonesia de una fábrica de papel; Zafer Kizilkaya, quien amplió las áreas marinas protegidas de Turquía; Tero Mustonen, pionero en la restauración de turberas en Finlandia; y la pescadora estadounidense Diane Wilson, que “perdió todo” enfrentándose a los contaminadores del océano (y ganando).
Wilson (en la foto) reveló cómo fue descartada como una ‘mujer histérica’ cuando comenzó su pelea, que dijo le costó amigos, su matrimonio y su trabajo. «Lo gracioso es cómo puedes perderlo todo, pero ganas tu alma», dijo.
Imagen: Premio Ambiental Goldman
